El derecho penal, también conocido como derecho criminal o derecho penal sustantivo, es una rama del derecho que se ocupa de regular los delitos, las penas y las medidas de seguridad aplicables a las conductas consideradas como delictivas por la sociedad.
El derecho penal establece las normas y los principios que determinan qué acciones son consideradas delitos, cómo se deben investigar y juzgar, y cuáles son las sanciones aplicables a quienes los cometen. Su objetivo principal es proteger los derechos de las personas y mantener el orden social a través de la prevención y represión de conductas delictivas.
El derecho penal abarca una serie de aspectos fundamentales, entre los que se incluyen:
Tipificación de delitos: El derecho penal define y clasifica los diferentes tipos de delitos, como el homicidio, el robo, el fraude, el narcotráfico, la violencia de género, entre otros.
Responsabilidad penal: Establece quiénes son considerados responsables de cometer un delito y bajo qué condiciones. También contempla la existencia de eximentes, atenuantes o agravantes de responsabilidad penal.
Procedimiento penal: Regula las etapas y los procesos judiciales para la investigación, el enjuiciamiento y el castigo de los delitos, asegurando el respeto de los derechos fundamentales de los acusados.
Penas y medidas de seguridad: Determina las sanciones y las consecuencias legales que se imponen a los autores de delitos, como penas de prisión, multas, trabajos comunitarios, medidas de rehabilitación o medidas de seguridad para proteger a la sociedad.
Es importante tener en cuenta que el derecho penal varía de un país a otro, ya que cada sistema legal tiene sus propias leyes y procedimientos. Sin embargo, existen principios generales del derecho penal, como el principio de legalidad, la presunción de inocencia y el derecho a un juicio justo, que son fundamentales en la mayoría de los sistemas jurídicos.